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Anchoas del Cantábrico
La anchoa del cantábrico es un valor al alza. Su gran sabor la ha convertido en delicatessen exquita. La anchoa se ha convertido en un selecto plato que compite con el jamón ibérico.
La anchoa del Cantábrico en conserva es un producto que combina una cuidada elaboración artesana con una larga tradición marinera y un altísimo reconocimiento culinario. Estas tres características la equiparan con otros grandes productos gastronómicos nacionales. Fue en la localidad cántabra de Santoña donde se "inventaron" las conservas de filetes de anchoa en aceite hace más de cien años. Este precioso pueblo marinero sigue siendo su centro neurálgico.
El proceso artesanal comienza en primavera. La costera de la anchoa, como se conoce a la temporada de esta especie, se desarrolla entre abril y junio. Es entonces cuando los grandes bancos de este pez gregario inician un recorrido que comienza en el norte de la costa atlántica francesa y termina en Galicia. Es la época del desove. La flota pesquera del Cantábrico se echa a la mar a su encuentro y, mediante la pesca de cerco con redes, realiza sus capturas. Este tipo de pesca, que consiste en envolver con grandes redes a los bancos de peces, es clave en el resultado final. La pesca con redes es el método utilizado por la flota española. El pez es alzado a la cubierta del barco "vivito y coleando" y no tiene una muerte traumática.
